Estudié en el Colegio Nuestra Señora del Pilar hasta el noveno año. En todo este tiempo aprendí a superar los retos de una manera positiva. Luego, cambié de colegio, al Técnico Don Bosco, en el cual empecé la carrera de Electrónica y me gustó pero al haber logrado junto a dos compañeras que un proyecto ayudara a personas con algún tipo de discapacidad, me di cuenta que la electrónica se podía aplicar a mi ideal de vida: ayudar a otros.
En los tres años que estuve en el Don Bosco, logré interiorizar muchos de los valores que este gran señor pregonaba en vida. Ahora, también tengo otros proyectos que son más abiertos al público, pero mi ideal siempre será formar una empresa dedicada a la fabricación de dispositivos para personas con algún tipo de discapacidad.
La electrónica es algo que me fascina, es un área que hoy en día se puede desarrollar en tantos ámbitos que me falta tiempo para conocer e investigar más. Me gusta trabajar con varias personas, ya que siento que tener diversas opiniones es mejor que tener una sola.
Me agrada inspirar a otras personas para que sigan adelante y que nunca se den por vencidas, pues gracias a Dios he recibido una formación muy integral en mi casa, en mis colegios y que actualmente transmito en mi empresa. Quiero enseñar a otras personas a construir más proyectos y a darle con todo a los problemas que puedan enfrentar en la vida también.